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SEMINARIO 19- ...O PEOR
Encuentro fortuito entre una
máquina de coser y un paraguas. Encuentro imposible entre la ballena y el oso
blanco. Uno, creación de Lautréamont; el otro, indicación de Freud.Ambos
memorables. ¿Por qué? Sin duda, ellos conmueven algo en nosotros. Lacan dice
qué.
Se trata del hombre y de la
mujer.
Entre los dos, ningún acuerdo ni
armonía, no hay programa, nada pre-establecido: todo está librado al azar, lo
que en lógica modal se llama “contingencia”. Nadie se salva. ¿Por qué esta es
fatal, es decir, necesaria? Hay que pensar que procede de una imposibilidad. De
ahí el teorema: “No hay relación sexual”. Esta fórmula es famosa hoy en día.
En el lugar de lo que así
agujerea lo real, hay plétora: imágenes que embaucan y que encantan, discursos
que prescriben lo que esa relación debe ser. No son más que semblantes, cuyo
artificio el psicoanálisis
“Hay Uno”. En el corazón del
presente seminario, este aforismo, que pasó desapercibido, completa el “No hay”
de la relación sexual, al enunciar lo que hay.
Entiendan: el Uno-solo. Solo en
su goce (radicalmente autoerótico) tanto como en su significancia (fuera de la
semántica). Aquí comienza la última enseñanza de Lacan. Allí reside lo esencial
de lo que les enseñó, y sin embargo todo es nuevo, renovado, patas arriba.
Lacan enseñaba la primacía del
Otro en el orden de la verdad y en el del deseo. Aquí enseña la primacía del
Uno en la dimensión de lo real. Recusa el Dos de la relación sexual y también
el de la articulación significante. Recusa el gran Otro, pivote de la
dialéctica del sujeto, le deniega la existencia, lo remite a la ficción.
Desvaloriza el deseo y promueve el goce. Recusa el Ser, que no es más que
semblante. La henología, doctrina del Uno, aquí está por encima de la
ontología, teoría del Ser. ¿El orden simbólico? En lo real no es otra cosa que
la iteración del Uno. De ahí el abandono de los grafos y de las superficies
topológicas en beneficio de los nudos, hechos de redondeles de cuerda, que son
Unos encadenados.
Recuerden: el Seminario 18
suspiraba por un discurso que no fuese del semblante. Pues bien, vean en el Seminario 19 el intento
de un discurso que partiría de lo real. Pensamiento radical del Un-dividualismo
moderno.